Los grandes cambios comienzan por 1 minuto de reflexión. Siempre tendremos 1 minuto para pensar antes de actuar. Y de ese minuto depende fomentar una catástrofe personal y familiar o por el contrario, un salvaguardar la unidad familiar. Por favor, detente a pensar 1 minuto. La vida es corta y quizás de este minuto estaremos haciendo una gran diferencia no solo en nosotros mismos, sino en aquellos a los que más amamos. La familia es tu mayor valor. Cuídala. Lo demás va y viene.