Muchos evaden cuando tienen un problema de forma consciente porque tienen miedo a enfrentar. Otros, también evaden pero de forma no tan consciente pero al final igual de dañino.
Cuando dices que algo no te afectó y en realidad si te afectó, o cuando -por ejemplo- buscas escapes para sentir placer es justamente porque tu mente está buscando evadir el dolor de lo que sucedió.
Evadir agranda el problema con el tiempo no lo resuelve. Al contrario, cada día que pasa no solo te estás tu generando un mayor sufrimiento al que ya tienes, sino que quizás estás entrando en un circulo vicioso donde a mayor evasión mayor escape y a mayor escape mayor dolor. Enfrente resuelve el problema evadir lo agranda.